México Evalúa
En el lugar desde el cual se observan los 10 años de la serie Hallazgos y, de hecho, la evolución misma de la reforma al sistema
de justicia más ambiciosa de las últimas décadas, no es difícil que cunda el desánimo. Al fin y al cabo, el movimiento hacia
una justicia más justa, más efectiva, más capaz de poner freno a la impunidad desbordada –más dispuesta, en fin, a responder a las expectativas de la
ciudadanía– ha sido a trompicones, accidentado, improvisado por decir lo menos, con enormes brechas entre entidades federativas y sin el liderazgo de la Federación
(y, a últimas fechas, con profundos retrocesos que acentúan el punitivismo y la militarización, en un contexto de ataques a la independencia judicial).
Hallazgos se ha convertido en referencia es porque desde su nacimiento traía incorporado el mecanismo de la autoevaluación y la adaptación. Quiero decir que Hallazgos no es un ejercicio académico rígido, unidireccional, alejado de su objeto de estudio. La serie reaccion a lo que la realidad le informa; de entrada, a los cambios en el marco legal y a los procesos políticos. Al inicio, cinco años después de entrar en vigor la reforma que dio vida al sistema acusatorio, se orientó a medir la implementación del sistema. Tiempo después, se propuso evaluar su consolidación en las instituciones estatales y federales, tras finalizar el plazo legal de la ‘primera fase’.
