Versión estenográfica
En la Comisión de Zonas Metropolitanas y Movilidad discutimos este tema y en algún momento, en algún punto, reflexionábamos si en verdad era pertinente un Día de los Vecinos, del buen vecino, la buena vecina, y llegamos a la conclusión que estos días pueden estar o están cargados de un simbolismo especial, y quiero yo, entonces, subrayar tres.
El primero de ellos es la necesidad de la reconstrucción del tejido social después de la pandemia.
Después de la pandemia se rompió una parte de la convivencia social, hubo una importante afectación en materia de salud mental para niños, para niñas, para nuestra convivencia.
Incentivar, códigos de solidaridad, subsidiaridad y compromiso comunitario puede tener entonces en esta fecha una clave vital, estamos convencidos en el grupo plural que lo que necesitamos, entonces, es la resignificación, después de la pandemia, de una convivencia solidaria que fortalezca al tejido social.,
Segundo. Esta convivencia requiere ciertas características y, de manera especial, quiero remarcar la convivencia democrática, la convivencia incluyente y la convivencia segura, esencialmente para las mujeres, para niñas y niños, que hoy por hoy en nuestras comunidades están en riesgo.
Hoy por hoy necesitamos que en nuestras comunidades se puedan construir espacios seguros para ellas, principalmente.
El Día del Vecino debe ser, el Día de la Buena Vecina, un espacio para la convivencia democrática en código de inclusión, con perspectiva de género y con una referencia donde la comunidad sea el primer espacio que abrace en seguridad y subsidiaridad a quien más lo necesita.
Y la tercera, necesitamos también recomponer el tejido de la sociedad civil que se ha venido debilitando.
En estos años lo que hemos venido viendo es que todo un trabajo importante de organización social se está erosionando.
En el barrio, en los pueblos, en las colonias, debe tomar mucha fuerza el trabajo de la sociedad civil.
Y creemos, entonces, que este día puede incentivar, sí, una sociedad civil que rinda cuentas, una sociedad civil transparente, pero con una visión de Estado que se entienda que en el Estado no sólo cabe el gobierno, sino que hay una multiplicidad de actores que toman forma en lo barrial, en lo comunitario, porque es ahí donde vive la gente.
Si decimos simplemente así el Día del Vecino puede no entenderse, el Día de la Vecina, pero si lo dotamos de contenido, de reconstrucción del tejido social, de subsidiaridad, de código democrático, de perspectiva de género, de seguridad, de inclusión y de tolerancia, podemos, entonces, aspirar a ser barrios no sólo que nos sintamos seguras y seguros, sino que sean espacios de convivencia que permitan nuevas visiones y proyectos, por ejemplo, proyectos ecológicos porque ahí es donde empieza la transformación del medio ambiente, ahí puede empezar el enfrentamiento al cambio climático.
Hoy hay nuevas dinámicas de transporte, todo lo que se conoce como la última milla, ahí toma lugar, fenómenos tan importantes como la movilidad.
Por eso creemos que tenemos que dar una visión de siglo XXI a la convivencia democrática y eso empieza por las y los vecinos.
En el Grupo Plural acompañaremos este dictamen y les invitamos acompañarlo.