La Jornada
Ciudad de México. La oposición rompió ayer el quórum en el Senado, para evitar que se aprobara la Ley General para Prevención y Gestión Integral de los Residuos, bajo la acusación de que la mayoría de Morena y su aliado del PVEM, aceptaron presiones de los empresarios que ponen en riesgo a aquellas entidades, con legislaciones más avanzadas.
La reforma, encaminada a prevenir y llevar a su mínima expresión la generación de residuos, así como a prohibir los plásticos de un solo uso, se aprobó en lo general con 76 votos a favor, uno en contra y tres abstenciones.
Todas las fuerzas políticas expresaron en tribuna que esa reforma, que se trabajó durante los pasados tres años, es fundamental para proteger el medio ambiente y evitar que ríos y mares se llenen de desechos plásticos, pero cuando se discutió en lo particular, no se aprobó una reserva que PRI, PAN MC y PRD habían consensado con Morena y sus aliados.